Lago en el cielo fue su epitafio musical. Absolutamente nadie imaginaba que iba a ser la última vez que a Gustavo Cerati se lo vería cantar esas líricas y tocar esas notas sobre un escenario por última vez.
«Vamos despacio para encontrarnos, el tiempo es arena en mis manos. Un lago en el cielo, es mi regalo».
Hace siete años, el 15 de mayo de 2010, en un concierto en el campus de la Universidad Simón Bolívar de Caracas, para compartir a su público latinoamericano su quinto (y último) disco solista, Fuerza Natural, el ex líder de Soda Stereo, sin saberlo, le decía adiós para siempre a los escenarios.
«Ahí va un regalo… no mío, sino de la naturaleza, o de lo que sea. Un lago en el cielo para todos… acá que estamos bien alto, gracias Caracas«.
En la altura, en una noche espesa y calurosa en ciudad venezolana, la despedida de Cerati fue a través de la onda expansiva musical deLago en el cielo, ese tema compuesto por él en 2005, lanzado e incluido en el álbum de estudio Ahí Vamos (2006) -aquel disco encabezado con populares temas y envuelto en canciones decididamente rockeras- que aún hoy resuena como la última sonoridad del único músico argentino que pudo dejar plasmado su legado en cada rincón del continente.
Excelso guitarrista, selló su recital con un solo que quedará en la memoria de sus fanáticos. Una extensa y emotiva, con destreza incluida, improvisación en la guitarra que duró cerca de dos minutos y que coronó el concierto de 23 temas -en los cuales realizó un repaso por sus exitosos cinco discos de estudio- junto a sus músicos Richard Coleman, Leandro Fresco, Fernando Samalea, Gonzalo Córdoba, Fernando Nalé y Anita Álvarez de Toledo.Fuerza natural, Magia, Deja vu, Desastre, Amor sin rodeos, Tracción a sangre, Cactus, Perdonar es divino, Uno entre mil, Artefacto, Rapto, Dominó, Sal, Trátame suavemente, He visto a Lucy, A merced, Pulsar, Te llevo para que me lleves, Marea de Venus, Vivo, La excepción, Crimen y Lago en el cielo, fue la lista que eligió el músico para compartir su último concierto.
«¿Te sentís bien?»
Según contó la revista Viva, de Clarín, en la última foto de la gira, minutos después de finalizado el recital, el sonidista Adrián Taverna vio a un Cerati pálido, con los ojos desorbitados. «¿Te sentís bien?». Gustavo abrió la boca para contestarle, pero no acertó a decirle nada. Fue como si los músculos de su mandíbula no encontraran las palabras. Luego de que la cámara disparara su flash y todo el equipo quede registrado en la última imagen todos juntos, Gustavo caminó confundido hacia su camarín. Después de 20 días en internado en Caracas, el músico fue trasladado a Buenos Aires. Primero fue llevado a la clínica Fleni de Belgrano, luego a la clínica especializada ALCLA.
«Chau Venezuela»
Al final de la presentación, poco después de bajarse de las tablas, en el camarín, un potente accidente cerebreovascular sumergió a Cerati en un intenso coma que duraría más de cuatro años antes de que muera, a los 55 años, la mañana del 4 de septiembre de 2014 como consecuencia de un paro respiratorio.
fuente: clarin.com